Las Casas de la Judería, Premio Rafael Manzano 2013

 

Luis Fernando Gómez-Stern e Ignacio Medina y Fernández de Córdoba, XX Duque de Segorbe, son los ganadores del Premio Rafael Manzano 2013, obtenido por su labor de restauración integral del barrio de la antigua judería sevillana.

Desde la década de 1950 y hasta principios  de los 80 la arquitectura clásica o tradicional en Sevilla se consideraba oficialmente anacrónica o inadecuada,  con la sola excepción de los monumentos  declarados.  La reconstrucción, aunque fuera parcial, no era admisible, tal como aún hoy ocurre con frecuencia.

El proyecto que les ha valido este Premio Rafael Manzano 2013, la restauración del conjunto conocido hoy como Casas de la Judería, constituye una actuación unitaria de recuperación urbanística de un barrio tradicional que enfoca la rehabilitación de las casas que en él se contienen. Supone la mayor intervención de carácter privado en el casco histórico de Sevilla, uno de los más extensos del mundo.  Su magnitud es de proporciones poco habituales en España, pues abarca 4 casas señoriales de arquitectura clásica y 15 casas de arquitectura popular -que suman 36 patios- en el entorno de las iglesias de Santa María la Blanca, San Bartolomé y el palacio de Altamira, sede actual de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, y en un perímetro que afecta a 8 calles.

Acabado en el año 2012, se ha llevado a efecto a lo largo de tres décadas,  casa a casa, conforme a la lógica de la formación del barrio, manteniendo el sentido de su evolución. Ha sido un trabajo artesanal realizado sin planificación inicial respecto a su extensión y uso. Eso le confiere una virtud no buscada a priori como es su flexibilidad para la adaptación  a distintos contenidos, permitiendo segregaciones y ampliaciones,  lo que convendrá a su permanencia y aptitud futura. El conjunto de 19 casas en la judería de Sevilla, está destinado en la actualidad al uso hotelero y residencial y es pues el resultado de la revitalización urbana de un sector histórico de gran valor artístico del centro de Sevilla.

En la restauración se han utilizado el lenguaje arquitectónico y las técnicas tradicionales con los medios auxiliares modernos así como materiales y terminaciones iguales a los originales que permanecían, usando para ello así mismo piezas de acarreo o materiales procedentes de derribos próximos.